Seré breve e iré al grano. Fui a comer con los compañeros de trabajo (así que os podéis imaginar que no está lejos de Avilés), así que no me fijé especialmente en las infraestructuras para los más pequeños, pero dio la casualidad de que, primero, nos encontramos a un amigo con su hijo de 2 años comiendo allí, y segundo, otro compañero me comentó que estaba muy bien para los niños.
Así que resumo cualidades para los peques que creo que son positivas:
- Tiene mucha zona verde, con columpios y toboganes para los más pequeños, y todo cerrado para que no se escapen (demasiado)
- Tiene mesas en el prado, aunque no sé si alguna a la sombra (no me fijé)
- Tiene una antojana enorme, para poder comer al aire libre, aunque esto, claro, ahora no es tan positivo porque es donde se concentran los fumadores.
- Tienen trona (que la vi)
- Aparcamiento amplio
- Es posible que tengan menú de niños, porque el hijo de mi amigo estaba comiendo un plato de pasta (lo comprobaré)
- Ingredientes de calidad y el cachopo (que fue lo único que pedimos) estaba muy bien, con una carne muy rica y sin exceso de aceite, por el módico precio de 12 € (realmente era medio cachopo). Por cierto, creo que no tardaron ni 5 minutos en servirnos los cachopos.
- Comimos en la enorme antojana, lo que en pleno agosto es muy de agradecer.
- Los postres muy bien también. Muchos caseros y por precios razonables (3-4,5€)
- Tienen menú del día (15 €), pero no tenía platos a elegir, así que me da la sensación de que no es un sitio especializado en menús del día (al menos en agosto)
- Trato y servicio correcto.
- Precio final por persona sobre los 16 €, con el cachopo (por persona), agua, varios postres y café para todos.
En definitiva, una buena nota y un buen sitio si queremos comer con los peques.
Como siempre, en el mapa podréis ver su ubicación concreta y un resumen de esto que os cuento.